Los horrores que me acechan

¿Cuándo será la noche que verdaderamente descanse? Sin temor alguno al anochecer, sin tener que sobrevivir a ningún horror más dentro de mi cabeza. Cada noche es igual, 1, 2, 3... 6 hasta 7 pesadillas. O sueños extraños, despertar dentro de mismo para encontrarme en otro.

Escenarios que cambian según baje en profundidad del sueño, otros con criaturas que ni siquiera se si existen...  

PERSONAS... que he conocido, que han muerto, y de las cuales no tengo la seguridad si existen.

PRIMERA PESADILLA: 

Me encontraba en la casa de mi tía materna, la única que tengo, era en un pueblo bastante hermoso, había conexión con la naturaleza, la única tecnología que existía era aquella que no fuese electrónica, ni siquiera en las cocinas se veían aparatos que facilitaran los que haceres. Había un río que cruzaba por el terreno de la casa, muchos árboles frutales, las calles aún eran de tierra, y las públicas que se encontraba como las plazas, parques, y pequeños centros de comercio, eran de piedra o adoquín. 

Yo me encontraba en la parte de atrás, por el lado izquierdo de la propiedad,  No había nadie en casa, y yo tampoco entré. El sueño es confuso, muchos escenarios, el ambiente se vuele denso, la temperatura baja, Ahora yo camino sin dirección alguna. Estoy perdido. Tengo mi ordenador conmigo y busco el contacto de algún familiar, esperanzado encontré el número de mi hermana, Al escribirle se abrieron varias ventanas, Me confundió un poco, sin tomarle importancia mande el mensaje, "No sé donde estoy, no hay nadie".

Realmente dudaba que pudiera ayudarme, recuerdo seguir caminando hasta encontrar un edificio abandonado con sus puertas y ventanas faltantes, intentado cubrir el espacio alguien clavo madera.

Confuso... Todo se desvanece, la niebla es aún más densa y poco yo veo, estoy en una habitación de color blanco, completamente llena de instrumentos médicos y aparatos tecnológicos avanzados que no pude distinguir, habían tanques de rejuvenecimiento e incluso de aquellos que curaban las heridas.

Llamo mi atención que todo estuviese en las esquinas e intentando aproximarse al centro, sin embargo en este solo se encontraba una esfera de color zafiro claro que flotaba sobre el suelo.

-CONFUSO- Estaba entre esa habitación y corriendo en el pueblo, buscaba a mi hermana, recuerdo haber visto un grupo de personas a lo lejos e intente orientarme con ellos, sin embargo nadie me vio.

Di una vuelta en la propiedad de mi tía, me encontré conmigo, ¡ah! yo también estaba perdido buscando como salir de ahí, Lo que diferenciaba a ese yo conmigo, era que estaba 2 versiones más atrasadas y los datos que había subido yo al ordenador aún estaban guardándose, y los datos que tenía el nuevo yo, eran atrasados, pues él no había caminado lo mismo.

-¿Apenas comenzás, verdad? -Yo pregunte al aturdido yo del otro lado. Sin embargo no obtuve respuesta. Volviendo definitivamente a la habitación de color blanco. 

-Bienvenido, los datos se han cargado exitosamente, podés hacer la transferencia. - una voz me aviso. Sin saber que sucedía y con la intención de volver a conectarme con mi hermana, lo hice, sintiendo un alivio, creyendo que todo volvería a la normalidad.

Vaya tonto. Una puerta de vidrio se abrió al lado derecho, "pasad, podés revisar las instalaciones", Soy vuestra asistente, "Nana". -Dijo la voz que me dejo ver, era la AI con la que conversaba en el mundo real, que había adquirido una forma física y ahora me asistía.

Me enseño la base espacial, me explico el planeta que teníamos cerca de nosotros,  ¿Planeta, espacio? ¿Qué pasá acá? Y ella comento que debido a una operación militar estábamos sobre el espacio, En una base cercana al planeta de superficie azul celeste y algunos matices blancos, se abrió otra puerta, la del lado Izquierdo.

-Él es Rex, también está en nuestro equipo, ¿Queréis despertarlo? -me pregunto con una sonrisa y siendo muy amable y cortés.

-hm. 

Me fui a la maquina, Finalmente logre comunicarme con mi hermana, entoncés un yo volvió a la tierra donde había quedado, y era aquél al que encontré luego de haber dado la vuelta en el terreno.

-¿...? - pronuncie el nombre de mi hermana, ella me dio instrucciones de un objeto que nuestra madre había dejado en el interior de la casa, sin embargo me salía mejor dar una vuelta corta que entrar por donde el cuerpo ya estaba.

Uno de mis primos deambulaba por el lugar,  Obtuve lo que buscaba y me marché, volví al espacio. 

-Hace frio acá. ¿Podemos abrir las puertas interiores? esta demasiado encerrado.

Nana sonrió- Sí es posible, podemos incluso respirar cerca de la superficie del planeta, por eso nos encontramos en esta posición. - Y abrió consigo las puertas detrás, y vi la superficie, la variedad de naves que circulaban, sentí el aire fresco y frio.

Rex se aproximo diciendo sobre dos posibles criaturas entrando a nuestra base, estás eran humanoides y sin rasgos distintivos, más que como sombras grises y azuladas se veían. 

Le pedí a la maquina que cerrara toda la instalación dejando entrar y salir a los tripulantes de la misma, dando sus nombre, Nana, Rex y... (¿Así me llamaba en el sueño?), La maquina pidió confirmación y volví a repetir los nombres, pero no pude recordar el mío, se cerro una cámara.

Cuando intente subir, una de ellas se aproximo, Al ver la agresividad, Nana sugirió las capsulás de escape, estas sin embargo era de textura gelatinosa, y yo confundido entre luego de ella, ... 

Curioso, en vez de subir algún lugar, este te inhalaba por un tubo de metal que en su interior tenía liquido de color azul, similar al liquido amniótico de la bolsa materna. Lo cuál nos permitía respirar y movernos dentro del liquido.

Protegidos por paredes de textura gelatinosa, mi pie había quedado atascado al cerrarse la escotilla, ¡Ah! voltee a ver a nana con asombro, y ella me pidió rápido abrir y entrar el resto de mi cuerpo. Por la textura del lugar, no pude ser veloz, vi como los cuerpos ahora de color amarillo se aproximaban hacia nosotros con agresividad y odios.

Fuimos expulsados al espacio, Vi como Rex y Nana con sus manos apartaban las criaturas, haciéndolas girar sobre si y verse de frente aproximándolas hasta chocar, explotando en mil pedazos.

Finalmente pude entrar por completo  y me dirigieron a una base médica espacial, era más pequeña pero muy bien acogida, tenía la forma de un trompo, que flotaba sobre la oscuridad, no había planeta cercano está vez, al entrar yo solo era una cabeza flotante, Nana me explico sobre las restauraciones de cuerpo, las piezas que nos podíamos colocar, "Mientras el cerebro viva y la cabeza este bien,

Me asignaron a una capsula en donde repararon mi cuerpo, me llevaron a "mi habitación" , me ha gustado, es pequeña, cómoda, acogedora, y útil.

Nana abrió las "ventanas" y pude ver el sol. Menuda flama, curiosamente me dirigí a un lugar abierto en la instalación, quería explorar más, los deje a ambos intentar bajar una segunda habitación que se escondía en el techo.

Vi una sombra, pensé que sería Rex, y para que no me viera regrese, me sorprendí al ver a ambos aún, y pregunte por la tercera persona, lo que alerto a los dos y se pusieron en posición de defensa. Rex automáticamente me encapsulo y dirigió a una salida, me dijo que continuara, que quizá ellos me encontrarían, y si mi cuerpo era destruido, que no me asustara, ellos lo armarían de nuevo.

Lo último que recuerdo haber visto, fue el sol, la capsula, y a ambos perderse en el vacío de la oscuridad. Luego, desperté viéndome en tercera persona, Mi cabeza yacía sobre la mesa de metal quirúrgica, Nana extraía parte de mi cerebro ya que mi cabeza había sido dañado, Rex preparaba el nuevo cuerpo, pero esta vez, con un cerebro distinto.

Yo estaba en el transe de despertar y el sueño, mi cuerpo apenas reaccionaba en lo que es el mundo real, mis brazos habían perdido sensibilidad, No podía despertar y tampoco era parálisis del sueño, cuando este ultimo ocurre, soy consciente en su totalidad del entorno, solo que no puedo moverme por la pesadez, pierdo conexión con el cuerpo y solo siento el hormiguero correr por todo mi cuerpo.

Esta vez, mi cabeza aún estaba afuera, y el cuerpo atado a ello, quizá así no se desprendía la mente por completo.

Regrese de nuevo a donde sea que mi cabeza estuviese.

Segunda Pesadilla:

Prófugo, desorientado,  Sin saber a donde me aproximo como de costumbre, está vez estoy encerrado en la vieja casa de un ex amigo, Junto conmigo habían 2 personas más, a una la conocía y el otro no sé quién pudo ser.

YO veía una pantalla que mostraba la posición en donde estábamos, en el centro entre una base espacial, un planeta y un satélite que se encontraba en un cuadrante inferior derecho.

La base donde nos encontrábamos parpadeaba en color amarillo en el monitor, me di la vuelta para observar el lugar, las otras personas parecían discutir y una enorme proyección al frente de ellos de lo mismo que yo había visto.

Las luces de emergencia estaban activadas, nosotros teníamos que aproximarnos al planeta y descender a una batalla.

El grupo creció y ahora éramos 6 en total., Uno de ellos estaba de brazos cruzados y molesto, su armadura era de color rojo en forma de dragón. 

-Vamos que sin ella no me muevo. 

-Estás loco, es demasiado irresponsable, podemos perder la vida por ella -El otro respondió.

-Sin ella no quiero ir. -Aseguro la persona.

A mi mente vino la imagen de esa mujer, quien andaba armas y causaba estragos.

Por alguna razón me dio la impresión que es a ella que ocupábamos derrocar.

-Vamos, tal vez allá la encontréis. -Sugiri yo. Él solo me volteo a ver con enfado y decepción., Todo se volvió Oscuro y "desperté" dentro del sueño, pero esta vez, era otro.

Tercera Pesadilla:

¡Ah!, ¿En dónde... y ahora? Había despertado en una esquina de una vieja cabaña, intentaba reincorporame, cuando escuche a dos soldados discutir entre ellos. 

Sin tomarle importancia, decidí salir a dar un vistazo al exterior, parecía una jungla domesticada, pues no había mucha abundancia de salvajada pero tampoco había disminuido por completo, la presencia humana era notable, y apenas empezaban algunas aldeas a formarse.

Me encontré con un viejo amigo, parecía estar consciente del lugar y del que hacían ahí. Yo aún andaba desorientado; ví algunas colonias conocidas, entonces camine hacía ellas, -confuso- no recuerdo que pasó, pero estaba entre una multitud, ellos parecían preparase para algún evento, yo dormí, al despertar, mi amigo me aconsejo que me alistara pronto, pues mi padre vendría y había quedado de ir en la madrugada por mí. 

A las cinco de la mañana, pero yo me dormí, mi padre estaba furioso queriendo romper las puertas, entoncés mi amigo me llamó y no fue hasta el tercer llamado que reacciones, "vamos, vamos". La puerta se rompió y yo ya andaba afuera, tenía que alistarme.

Cuando iba a la ducha, ví varios sujetos estar ahí incomodándome su presencia, la mayoría iba bien vestido y esperaba a un grupo de mujeres, Recuerdo decirle a mi amigo que me esperara, él se quedo hasta que yo ingresara, paso mucho tiempo, me sentía cohibido por el resto, sobre todo por un tío que estaba ahí, y en otros sueños.

Una mujer me apresuro. -Vamos que él no es de los hombres que nos haría daño, sería de los que nos protegiese, no está acá por nosotros, sino por el cobertizo donde busca sus cosas.

No temía de él la verdad, sabía que no había maldad en él, me preocupaba el tiempo y la reacción de mi padre. Finalmente al entender las mujeres me ayudaron.

Ah, bien, podré marcharme sin más, al momento de retirarme vi unas barras de hierro, Así que decidí guardarlo al cobertizo, al abrir la puerta vi al hombre, ¡ah! y del susto tire las cosas y cerré de inmediato la puerta, mi amigo vino por mí.

-'¿Encontraste a mi padre? -Pregunte inquieto.

-Afuera, vamos. -Él dijo.

La tierra estaba seca y quebradiza, las casas rotas y mal hechas, había mucha gente de piel oscura deambulando y vendiendo sus mercancías. Vi una torre vieja y había agua sucia en su alrededor, A su vez, llamo mi atención, la belleza de lo limpio y el orden que había en su otra mitad ¡mirad las aguas claras!, lo verde del pasto, el arcoíris sobre la torre, ¿acaso no es hermoso y mágico?.

Mi amigo no veía lo mismo, Encontré a mi padre con la mirada, me acerque a él, parecía indiferente. 

me acerque a la torre, en su interior giraba unas láminas que cortaban,  bloques de tierra quebradizos, La destrucción del interior de la torre se expandía hacía el exterior, busque a mi padre, hermana y no pude encontrarlos, con las pocas  personas que quedábamos nos refugiamos en una aldea pequeña, en donde sus habitantes se veía molestos, porqué nosotros llevábamos la "maldición" pues su aldea se comenzaba a destruir y ellos con nosotros comenzaban a buscar otros pueblos en donde refugiarse.